CG: nf
CA: Medicina – Otrorrinolaringología; Semiología y Patología.
CT: La sordera y los defectos de audición. Se llama defecto de audición a la incapacidad de oír tan bien como una persona cuyo sentido del oído es normal. Las personas aquejadas por este problema pueden ser duras de oído o sordas. Si la persona no oye nada en absoluto, lo que padece es sordera.
Los defectos de audición pueden ser hereditarios o estar causados por la rubéola materna, algunas complicaciones del parto, ciertas enfermedades infecciosas como la meningitis, el uso de medicamentos ototóxicos, la exposición a ruidos o sonidos excesivos y el envejecimiento.
Casi la mitad de los casos de sordera y defectos de audición se puede prevenir si las causas comunes se atienden en el nivel de la atención primaria de salud.
F: OMS – http://cort.as/-J322 (consulta: 2.06.2019)
DEF: Privación parcial o completa del sentido del oído.
F: DTMe (consulta: 2.06.2019)
N: 1. Derivación sustantiva de «sord-o/-a» (del latín surdus); documentado en español desde 1528.
2. La primera vez que aparece en un documento en español registrado por el CORDE es en 1528. Autor: Francisco Delicado. Título: La Lozana Andaluza. País: España. Tema: 12.Relato extenso diálogo y miscelánea. Publicación: Claude Allaigre, Cátedra (Madrid), 1994.
Según el Nuevo Tesoro Lexicográfico de la Lengua Española (NTLLE), aparece recogido por primera vez en el diccionario FRANCIOSINI de 1620.
3. En general, cuando hablamos de personas sordas no siempre utilizamos con precisión este término. Normalmente calificamos como sordo a todo aquel que ha perdido la audición, sin embargo, esto no es correcto.
Debemos distinguir dos términos que están muy relacionados, pero que no son exactamente lo mismo: la hipoacusia y la sordera. Ambos conceptos aluden a la pérdida audición, sin embargo, tienen características distintas.
La diferencia principal entre la sordera y la hipoacusia es el grado de intensidad de la pérdida auditiva. Así, las personas que padecen hipoacusia sufren una pérdida auditiva que no supera los 70dB, y en cambio, las personas con sordera han perdido más de 70dB en su capacidad auditiva.
4. Es muy común que con la edad aparezcan problemas de audición. Este tipo de pérdida auditiva se llama presbiacusia, y para su detección temprana es fundamental realizarse pruebas auditivas, como las audiometrías, que evalúan el estado de la audición. Con ellas, podemos evitar además posibles complicaciones en el futuro.
Afortunadamente, la pérdida auditiva tiene remedio a día de hoy, siempre y cuando no se trate de anacusia, que es la pérdida total y absoluta de audición en uno o en ambos oídos. En los demás casos, en los que la audición no se ha perdido por completo, una de las soluciones auditivas preferidas por quienes quieren recuperar la audición son los audífonos.
F: 1. DTMe (consulta: 2.06.2019); DLE – http://cort.as/-J31O (consulta: 2.06.2019). 2. CORDE (consulta: 2.06.2019); NTLLE (consulta: 2.06.2019). 3 y 4. Audifon – http://cort.as/-J32Q (consulta: 2.06.2019).
SIN:
F:
RC: anacusia, hipoacusia.