pirómano, na
2068 Visualizaciones

CG: nm, nf

CA: Medicina – Psiquiatría; Psicología.

CT: Cuando el pirómano incendia, no consigue nada, ni enriquecerse, ni vengarse de alguien, nada… Lo único que obtiene es placer, el gusto de ver arder a su alrededor.
La psiquiatra forense nos describe los rasgos característicos de la persona que sufre el trastorno psiquiátrico conocido como piromanía, incluido en los principales libros de diagnóstico de enfermedades psiquiátricas.
Los Psiquiatras dicen que es incorrecto atribuir la autoría de un incendio a un pirómano hasta que no se le ha localizado y no se han podido descartar otras motivaciones que puedan llevar a alguien prender fuego en un monte.
Los Psiquiatras aducen ante la quema de un monte, que puede existir una causa de ininputabilidad, ya que la piromanía supone el 9,79% de los incendios intencionados.

F: CONSABOG – http://consultas-abogados.es/psiquiatria-forense-piromano/ (consulta: 15.11.2017)

DEF: Persona que padece piromanía, es decir, un comportamiento caracterizado por la reiteración de actos o intentos de prender fuego a objetos o provocar incendios, sin motivo aparente, junto con una insistencia constante sobre temas relacionados con el fuego y la combustión.

F: DTMe (consulta: 15.11.2017)

N: 1. adj. Dicho de una persona: Que padece piromanía. Usado también como sustantivo.
Término compuesto por los elementos compositivos «piro-» (del griego πῦρ- pyr(o)-, ‘fuego’) que significa ‘fuego’ y «‒́mano, na» (de la raíz del griego μανία manía ‘locura’) que significa ‘que tiene obsesión o hábito patológicos’.
Uso habitual: adjetivo sustantivado.
2. No hay resultados en el CORDE, pero sí en el CREA. Año: 1975. Autor: Francisco Umbral. Título: Mortal y rosa. País: España. Tema: 07.Novela. Publicación: Destino (Barcelona), 1995.
3. Según el Nuevo Tesoro Lexicográfico de la Lengua Española (NTLLE), aparece recogido por primera vez en el diccionario ACADEMIA USUAL de 1984. pirómano, na. adj. Dícese de la persona que padece piromanía. Ú. t. c. s.
4. Puede existir también un interés anormal en los aspectos relacionados con la extinción de incendios, que se plasma a veces en la realización de llamadas inmotivadas a los bomberos.
5. Comenzar un fuego entre los niños y adolescentes y la piromanía en adultos puede ser crónica o episódica. Algunas personas pueden provocar incendios con frecuencia como una forma de aliviar la tensión, otros al parecer lo hacen solo durante los períodos de inusual de estrés en sus vidas.
6. En el lenguaje coloquial, se usa con frecuencia de forma impropia como si fuera sinónimo de «incendiario».
7. Puede verse también «piromaníaco».
8. Diferencia entre ‘pirómano, na’ e ‘incendiario, ria’:

  • La Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA), con el asesoramiento de la Real Academia Española, indica que el incendiario se diferencia del pirómano porque este sufre una enfermedad llamada piromanía y disfruta provocando fuegos y viendo las consecuencias del incendio. Así pues y salvo que se trate de una enfermedad, en lugar de pirómano lo correcto es usar el término incendiario.
  • Fernando A. Navarro comenta que la diferencia es diáfana, pues todo pirómano es por definición un incendiario, pero la mayor parte de los incendiarios no son pirómanos ni enfermos mentales, sino que actúan movidos por intereses económicos, por venganzas o rencillas particulares, por deseo de hacer daño a terceros o por mero afán de protagonismo. La mayor parte de quienes adrede prenden fuego a los bosques son simples incendiarios, no pirómanos.

9. Interrelación cultural: Podemos mencionar el libro, publicado en 1953, ACTOS IMPULSIVOS. Manía ambulatoria. Piromanía. Narcotomanía. Cleptomanía. Dipsomanía. El juego. El tic. (Desórdenes del instinto y del afecto, VI) de Wilhelm Stekel (1868-1940).
En cuanto al personaje Mizoguchi, ordenado bonzo en la novela El Pabellón de Oro (1956) de Yukio Mishima (1925-1970), pensamos que no era ni pirómano ni incendiario, sino una persona atormentada por sus complejos que se sintió liberado tras incendiar el espléndido templo zen Rokuon-ji (鹿苑寺, Templo del Jardín de los Siervos) de la rama del budismo Shôkoku-ji de la Escuela Rinzai, templo conocido bajo la denominación popular de Kinkaku-ji (金閣寺, literalmente Templo del Pabellón de Oro) y ubicado en Kioto (Japón).

F: 1. Dicciomed – https://goo.gl/sfejhH (consulta: 26.10.2017); DLE – http://cort.as/-_JQE; http://cort.as/-_JQF (consulta: 30.10.2017). 2. CREA (consulta: 12.11.2017). 3. NTLLE (consulta: 16.11.2017). 4 y 5. GPSI – http://cort.as/-_JQJ (consulta: 31.10.2017). 6 y 7. DTMe (consulta: 14.11.2017). 8. FUNDÉU – http://cort.as/-_JLI (consulta: 14.11.2017); LABLENG – http://cort.as/-_JLN (consulta: 14.11.2017). 9. Iberlibro – http://cort.as/-_KG4 (consulta: 15.11.2017); Lecturalia.com – http://cort.as/-_K5p (consulta: 15.11.2017); Japonismo – http://cort.as/-_K5t (consulta: 15.11.2017); FCB.

SIN:
F:

RC: incendiario, ria, incendio, piromanía.